actitudlibre
11/12
“La montaña nos ofrece oportunidades para aprender
durante todo el camino”.
Andrea Cardona.
Mi motor de motivación para seguir enfocada en mi
objetivo era el poder visualizarme llegando a la cumbre del Everest. Esa fe me
dio energías para los fuertes entrenamientos en la fase de preparación.
Al pasar 54 días en esa expedición y encontrarme
en los últimos pasos de mi objetivo, sentí una especie de desconcierto y vacío.
Es como si al estar concluyendo ese gran sueño, me estuviese quedando sin algo
que me había movido por tanto tiempo.
No era solo eso, sino el hecho que podría estar
solamente unos minutos en ese lugar específico: la cima. Sin embargo, al
llegar, la vista espectacular desde la cumbre me llenó de inspiración pues hay
muchas otras montañas que se ven pequeñas desde allí e incluso que se pueden
escalar; esta visión me dio una perspectiva del mundo y de mis posibilidades
más amplias.
Al bajar de la cumbre, tuve por primera vez la
convicción que no existe nada realmente imposible y aprendí que lo más
importante que me dejaba esta experiencia era todo lo que había aprendido en el
proceso. El momento de conclusión de una meta pasa muy rápido y si actuamos
solo en función del futuro, nos perdemos del único momento que realmente nos
pertenece: el ahora.
Lo que aprendí en esa trayectoria es lo que hoy
puedo usar para todas las metas de la vida, sean montañas o no. Sé que la
disciplina, la fortaleza, el coraje, la fe y las habilidades necesarias se
pueden desarrollar y que lo único que nos separa de nuestras cumbres es el
tiempo.
¿Sabías qué…?
- El penacho blanco que suele ondear en la cima
del Everest es una corriente en chorro (jet stream) con una velocidad de 402
kilómetros por hora y que para el alpinista suena como el despegue de un avión
Boeing 747. Por ello, la época ideal para escalarlo es cuando los vientos del
norte se encuentran con los vientos del sur, lo que estabiliza la montaña y la
hace escalable.
- La última fase del Everest es conocida como “La
zona de la muerte”, ya que los escaladores tienen de dos a tres días para
intentar llegar a la cumbre antes de tener complicaciones serias.
- La presión atmosférica en la cima del Everest es
alrededor de un tercio de la presión al nivel del mar y por lo tanto, la
cantidad de oxígeno respirable es igual a un tercio de lo habitual.
Andrea Cardona fue la 1ª mujer centroamericana en
escalar el Everest. Facebook.com/RumboalEverest.
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